Peregrinación a Polonia Tras las huellas de Juan Pablo II

>Peregrinación a Polonia Tras las huellas de Juan Pablo II <p>&nbsp;</p> <div><span style="text-decoration: underline;">12/08/2013</span></div> <div>Visitamos el convento de Santa Faustina, hermana de Nuestra Se&ntilde;ora de la Misericordia (congregaci&oacute;n formada en 1891 por el pr&iacute;ncipe A. Lubomirski para ni&ntilde;as abandonadas y mujeres con necesidad de renovaci&oacute;n moral).</div> <div>No pod&iacute;a ser de otra manera, en el coraz&oacute;n de un pueblo fuertemente arraigado e la fe y que ha sufrido durante siglos la injusticia, la persecuci&oacute;n y la violencia, el Se&ntilde;or, a trav&eacute;s de Sor Mar&iacute;a Faustina, env&iacute;a al mundo la Divina Misericordia, un misterio que nos limpia de rencor, de venganza, de odio y dispone el coraz&oacute;n para el perd&oacute;n, la reconciliaci&oacute;n, el amor al pr&oacute;jimo a pesar de todo.</div> <div>All&iacute; nos encontramos con la bas&iacute;lica dedicada a la Divina Misericordia y con el Instituto de Juan Pablo II, todav&iacute;a en construcci&oacute;n.</div> <div>Tras comer en un lujoso restaurante del barrio antiguo de Cracovia, en la misma plaza del Mercado, dedicamos la tarde a saborear los lugares santos, a compras souvenirs,...</div> <div>Finalizamos el d&iacute;a con un excelente concierto a piano de Chopin, a manos del virtuoso Pawel Kubica, solo para nosotros y en un encantador palacete de &eacute;poca.</div> <div>&nbsp;</div> <div>&nbsp;</div> <div><span style="text-decoration: underline;">13/08/2013</span></div> <div>... Y llegamos a Auswich, el destino mas esperado pero el mas temido. El ambiente es sobrecogedor, e incluso notamos un cierto olor peculiar. Nos llama la atenci&oacute;n, la objetividad y el respeto del gu&iacute;a al describirnos los lugares y los echos ocurridos; adem&aacute;s de la carga emocional que sent&iacute;a y transmit&iacute;a. All&iacute; visitamos la celda donde muri&oacute; San Maximiliano Mar&iacute;a Kolbe; en ella se encontraba la vela que Juan Pablo II coloc&oacute; en su visita al campo.</div> <div>Coronamos el d&iacute;a celebrando una emotiva Eucarist&iacute;a en el convento de las Carmelitas Descalzas (que fueron trasladadas por el empe&ntilde;o de las jerarqu&iacute;as jud&iacute;as desde el campo de concentraci&oacute;n donde estaban a esta nueva construcci&oacute;n donada por los alemanes).</div> <div>Comemos en ruta hacia Varsovia, como siempre, en un espectacular restaurante con unos jardines de ense&ntilde;o.</div> <div>&nbsp;</div> <div><span style="text-decoration: underline;">14/08/2013</span></div> <div>Y llegamos al final de esta enriquecedora peregrinaci&oacute;n, con el coraz&oacute;n lleno de gratitud y felicidad, por las experiencias vividas, los momentos compartidos y los amigos encontrados y mas conscientes de la realidad y sufrimiento del pueblo polaco a lo largo de la historia que desde ahora tendremos presentes en nuestras oraciones.</div> <div>&nbsp;</div> <div>Queremos dar las gracias a la organizaci&oacute;n, los gu&iacute;as, a Jos&eacute; Joaqu&iacute;n y todos los que han colaborado en la elaboraci&oacute;n del completo y documentado cuadernillo de peregrinaci&oacute;n, que os recomendamos le&aacute;is.</div>